Madonna está lista para escribir otra página en su historia musical. La artista estadounidense confirmó que en 2026 publicará un nuevo disco, su primer trabajo de estudio en siete años, y lo hará regresando a Warner Records, el sello con el que construyó su estatus de ícono global. El anuncio, hecho a través de sus redes sociales, generó entusiasmo entre sus seguidores y en la industria, pues supone un reencuentro con la discográfica que acompañó sus mayores éxitos.
La relación entre Madonna y Warner se remonta a los años ochenta, cuando lanzó álbumes que definieron el pop de toda una generación: Madonna (1983), Like a Virgin (1984), True Blue (1986) y Like a Prayer (1989). Tras una fructífera colaboración que se prolongó hasta Hard Candy (2008), la artista pasó a Interscope, sello con el que editó MDNA, Rebel Heart y Madame X. En 2020 abandonó ese contrato, abriendo la puerta para que toda su discografía regresara a Warner, donde ha vendido más de 200 millones de copias.
En un comunicado citado por Rolling Stone, Madonna celebró esta nueva etapa: “Desde el principio, Warner Records ha sido un verdadero aliado. Estoy feliz de reunirme y miro hacia el futuro con ilusión, creando música, haciendo lo inesperado y, quizás, provocando algunas conversaciones necesarias”.
El próximo disco promete ser un “regreso a la pista de baile”, según adelantó la cantante, que ha estado trabajando en Londres con el productor británico Stuart Price. La dupla ya había coincidido en el exitoso Confessions on a Dance Floor (2005), un álbum clave en su carrera, y en la reciente gira Celebration Tour (2023-2024). Desde octubre de 2024 han compartido sesiones en el estudio, y Madonna reveló en diciembre que escribir canciones “ha sido medicina para mi alma”.
Este lanzamiento marcará el cierre de un proceso iniciado en 2021, cuando Warner asumió el control de todo el catálogo de la intérprete. Los copresidentes del sello, Tom Corson y Aaron Bay-Schuck, la describieron como “un referente cultural que ha redefinido la música pop y la cultura misma”, y afirmaron que su regreso “representa un momento histórico que cierra el círculo y abre una etapa llena de creatividad e impacto”.
Mientras los detalles del álbum permanecen bajo reserva, todo apunta a que Madonna está lista para recuperar su espíritu más bailable y volver a provocar, innovar y marcar tendencias, como ha hecho desde sus primeros pasos en Nueva York hasta convertirse en la reina indiscutible del pop.